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22 de septiembre de 2016

El otoño... me toca el coñ...

Ya estamos en otoño ¡¡¡ YUPIIIIII !!! Para mí el otoño llegó el día 20 de septiembre, con todo lo que ello conlleva: bajada de temperatura, subida del porcentaje de humedad, aumento de días ventosos... ¡¡¡ sí !!! ¡¡¡ Bienvenida alergia!!! ¡¡¡ Alegría para todos!!! 
El asma no te abandona nunca pero en mi caso se agrava con todos estos factores, así que entrenar se convierte en algo así como una especie de ruleta rusa pero menos mortal, aunque más dolorosa, ¿podré acabar el workout con un sólo toque de ventolín o será algo más jugoso? Normalmente cuando veo el workout ya sé si me espera susto o muerte, según la cantidad de cardio y de ejercicios explosivos sé lo que puedo esperar, pero hay sorpresas. Este martes me encontré realmente mal justo después de la ronda 8 de 10. Ya desde la ronda 5 estuve con mucha flema, calor en exceso, mocos, picor de ojos y de nariz, tos... momentos ligeros de mareo, sed... un carrusel de diversión vaya, pero hubo un momento en el que una flema se quedó atrapada, eso que ni baja ni sube... no tengo vocabulario suficiente para describir lo que sentí, la afixia, el calor, la tos y las náuseas, son segundos que se vuelven largos y desesperantes. Costó mucho deshacerme de ella, hace tres días que tengo un ligero dolor en la garganta del esfuerzo que tuve que hacer para conseguirlo. En este punto del relato muchos estaréis horrorizados, enfadados, incrédulos, pero no me importa, es lo que hay, tengo que seguir mejorando, tengo que reducir la influencia del asma en mi vida, eso no es gratis, no es regalado, hay que pelearlo, y para los que no me conocéis os diré que otra cosa puede que no, pero peleona soy un rato.




18 de septiembre de 2016

Mundo dos-barra-tres

He estado observando que hay cuatro mundos aparentemente irreconciliables que a su vez podemos englobar en dos:
- Los que dicen: "correr es de cobardes" o "pa qué coño quiero yo hacer deporte"
- Los que hacen deporte.
Estas son dos posturas irreconciliables hasta que uno del primer mundo comienza a tontear con el segundo mundo... y cae en sus redes, mundos reconciliados hasta que éste último comienza a no entender a los de primer mundo.
Dentro de este segundo mundo también hay divisiones porque el mundo deportivo es muy amplio y vasto, pero realmente donde he encontrado más "piques" es en el deporte de entrenamiento, aunque hay gente para todo y generalizar no es bueno, pero cuando se generaliza es porque se observa un patrón:
- Los que entrenan en ginmasio con maquinaria y levantamiento de peso.
- Los que hacen Crossfit
- Los que hacen calistenia, entre los cuales me incluyo.

Los primeros suelen mirar a los segundos como si fueran un quiero y no puedo:
         Entrenan en grupos como si fueran una manada, como necesitados de un grupo para crear su propia fuerza individual. Levantan pesos pero de nena (esta parte es ofensiva por partida doble)
A los últimos ni siquiera nos consideran verdaderos atletas... (f*º´@#%)

Los segundos están de moda:
        tienen el respaldo de la comunidad Crossfit que es muy amplia y con un alto reconocimiento mundial gracias a la marca y su marketing para hacerlos sentir algo más importante y grande, no necesitan estar todo el día levantando pesos como los "pirados del gimnasio" para estar fuertes y además suelen ser más agiles que éstos. De los últimos piensan que no son lo bastante fuertes para hacer Crossfit, que es lo que realmente mola... yes, again.

Los terceros molamos, sí, jajajaja, se nota, ¿verdad?
         Los que hacemos calistenia pensamos que no necesitamos levantar pesos para estar fuertes, que es cuestión de entrenar duro, porque hacer ejercicios con nuestro propio peso ya nos hace ir cogiendo fuerza, que los movimientos basados en los movimientos naturales de nuestro cuerpo nos va a evitar lesiones, que los entrenamientos de cardio están dirigidos a hacernos más ágiles y rápidos, que nos gusta tener músculos funcionales y no sólo bonitos, que no necesitamos, ni necesitaremos jamás, hacer una "squat pistol" sobre una bola de piedra. De nuevo... ¿se nota? 

Todo esto salió de una conversación en la que participé en una boda, como oyente nada más, porque todavía no era calisténica, jajajaja, era cuando estaba todavía en el primer mundo y no entendía nada que la gente estuviera deseando enfundarse unas mallas y comenzar a sudar como cerditos. Ahora gracias a las redes sociales y demás he seguido observando. Es cierto que hay estas apreciaciones de una forma casi generalizada. Aunque mi amor a la calistenia está declarado, decir que, ante todo, todos los deportistas me merecen un respeto, cada uno elige lo mejor o más divertido para sí mismo, pero el sacrificio diario, la entrega, la responsabilidad de hacerlo bien y mejorar cada día es igual para todos. Yo cambié el primer mundo por el segundo-barra-tres hace doce meses ¿y tú? ¿a qué mundo perteneces?