TIENDA

3 de noviembre de 2016

Hallo... what?

Recuerdo cuando Halloween era sólo la víspera de Todos los Santos, cuando nos reuníamos en casa toda la familia para hacer dulces típicos de la fecha y pasar un rato divertido, recuerdo cuando comenzamos a disfrazarnos de cosas que dan miedo, recuerdo también cuando comenzamos a pedir "truco o trato" por las casas de los vecinos... pero no recuerdo cuando esta fiesta se convirtió en "vamos a disfrazarnos de guarrilla que da miedo" o simplemente "de guarrilla"... creo que se nos ha ido de las manos y no recuerdo de qué momento sucedió. Un disfraz tiene que ser divertido y darte juego, tiene que ser algo que te haga sonreír, y en Halloween tiene que dar miedo, ¿estoy equivocada. No es necesario ir luciendo cacha porque sí, pero estos días Instagram ha estado lleno de chicas fitness disfrazadas de cualquier cosa pero luciendo tipo, en unos casos de una manera más acertada que en otra, pero la mayoría de una forma un tanto preocupante, de hecho eso me ha dado realmente miedo. ¿De verdad hay que reducir el tamaño del disfraz tanto? ¿Se venden por cantidad de tejido? ¿Hay tanta necesidad de mostrar lo estupendas que estáis? ¿No es suficiente con las fotografías de seguimiento que subís tooooodos los días? Porque ya que estamos os diré que vuestros outfits de entrenar también son escasos en tela...


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